Sucede que, las maestras realizaron una actividad para familiarizarlos con la lengua escrita que consistió de varias partes. Primero, les pidieron investigar qué es un cuento y las partes que lo constituyen (yo pensé que ya estaban en el curso de Crítica Literaria I, y que tendrían que estudiar a Jakobson, jajaja). Al mismo tiempo les pidieron investigar el nombre de un animal que tuviera la misma letra inicial que el de cada uno de ellos.
Pues aunque buscamos opciones, nos quedamos con la única que encontramos en el momento: iguana.
Después, en el salón de clases y de manera colectiva, los niños construyeron un cuento en el que participarían todos los personajes (24). Realizaron la máscara respectiva y lo presentaron (ya en forma de obra teatral) el viernes 9 de marzo.
Como es de esperar, la actividad nos gustó mucho a los padres de familia.
Y sigo preguntándome: ¿cómo le hacen las maestras del jardín para tener tan buenas ideas para desarrollar con los niños?
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